Errores comunes en tu práctica de Yoga

No importa si estás iniciando con tu práctica o si ya tienes un buen tiempo practicando Yoga, es muy fácil dejarnos tentar por nuestro ego. Un ego que nos lleva a caer en una serie de errores que pueden llegar a frustrarnos o lesionarnos. A continuación, te presentamos algunos errores comunes que todas y todos realizamos durante nuestra práctica de Yoga.

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No respirar correctamente

Típico que, cuando estás realizando una postura que te cuesta trabajo, porque requiere de mucha fuerza, equilibrio y/o flexibilidad terminas aguantando la respiración para poder aguantar la postura; como si al mantener el aliento dentro de los pulmones adquirieras algún tipo de fuerza sobrehumana que te permite alcanzar la postura.

Al perturbar la respiración, la mente se perturba. Al restringir la respiración, el yogui obtiene estabilidad mental. – Yogi Swatmarama (Hatha Yoga Pradipika)

Sin embargo, al igual que cuando corres, nadas o pedaleas, la respiración es de suma importancia al momento de practicar Yoga. Durante toda tu práctica debes de mantener una respiración constante y fluida por la nariz. Poniendo toda tu atención en el cómo y cuándo estás inhalando y exhalando, asegurando que, durante las posturas tu respiración sea relajada.

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Toma en cuenta que, si no puedes mantener la respiración fluida durante la postura, lo ideal será que la relajes y te vayas preparando con alguna variación más sencilla. Por otro lado, en el caso de las clases basadas en Vinyasa (Power, Ashtanga, Dharma, etc.) la respiración debe guiar al movimiento; es decir, realizar el movimiento al inhalar o al exhalar. Eso sí, en el momento en el que se agite tu respiración, deberás descansar.

Querer alcanzar las posturas más avanzadas

No importa si estás empezando con tu práctica o si ya tienes un buen tiempo practicando Yoga, siempre terminarás impresionadx por las posturas que realizan tus compañeras o compañeros de clase, o por las posturas que suben las y los influencers yoguis a Instagram. Y sí, es normal que quieras realizar todas esas posturas avanzadas, o profundizar las que ya estás empezando a dominar.

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Sin embargo, es importante tomar en cuenta que, la práctica de Yoga Postural es un camino infinito y que no existen atajos para llegar a las posturas. No debes dejarte controlar por el ego, mismo que te llevará a intentar alcanzar esas posturas avanzadas, aunque no estés lista o listo para las mismas. Y, al intentarlas, es probable que termines lesionándote o frustrándote por no lograrlas. Por lo mismo, es importante que no permitas que el ego controle tu práctica, tomando en cuenta que es tu práctica y debes ir a tu propio ritmo.

Si ocurren accidentes en yoga, no es por culpa del yoga, sino de la agresividad del alumno que lo hace. – BKS Iyengar (El Árbol del Yoga)

Comparar tu cuerpo y logros con los de lxs demás

Siguiendo con el punto anterior, es muy importante tener siempre en mente que, durante la clase de yoga lo único importante es tu práctica y tu proceso. Seguramente te encontrarás con otras personas que logran posturas mucho más avanzadas y profundas que tú, o que están en mucho mejor forma física que tú. Pero, a diferencia de todos los demás tipos de entrenamiento, el Yoga no es una competencia; el Yoga trata de el camino que recorres con tu cuerpo y tu mente, y no de llegar a una meta antes que lxs demás.

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Recuerda que, todas las personas son diferentes. Que todxs tenemos habilidades muy diferentes y nuestras vidas han sido radicalmente diferentes. Por lo mismo, siempre verás gente con cuerpos más “estéticos”, más delgados y/o fuertes; así como personas con más facilidad para alcanzar unas posturas u otras. Al igual que, en el punto pasado, no debes permitir que el ego te controle comparándote con lxs demás, pues podrías terminar frustrándote. Yoga es un camino personal, y lo único que debe importarte es tu propio proceso.

Dudo de que haya alguien que realmente no quiera mejorar, e incluso si nuestro primer paso surge del deseo de mejorar y, por lo tanto, está enraizado en el ego, sigue siendo un paso correcto porque nos lleva al primer peldaño de la escalera de yoga. – T.K.V. Desikachar (The Hearth of Yoga)

Abandonar las posiciones cuando no te salen

Durante tu práctica de yoga, siempre te encontrarás con posturas que te pesan o te cuestan mucho trabajo. Posturas que representan un enorme reto para tu cuerpo y tu mente. Un reto que puede terminar frustrándote y llevándote a abandonar esa postura para “bien”. Es decir, evitarás realizarla cada que la pongan en clase, o realizarás alguna variación mucho más sencilla de la misma.

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Pero debes saber que, normalmente esas posturas que nos frustran tanto son las que más necesitamos. No dejes que te controle el ego, y no te dejes frustrar por la postura. ¡No evites la postura! Simplemente debes de ser paciente y practicar, practicar y seguir practicando, buscando alcanzar la postura poco a poco.

El mismo foco de la mente se utiliza para observar las sutilezas que surgen en todo el cuerpo. Un cierto nivel de meditación crea las condiciones para la postura, y una postura refinada agradece el gesto con el regalo de una meditación fluida. – Richard Freeman (El Espejo del Yoga)

Creer los mitos del yoga

El yoga solo es para personas flexibles. Solo las mujeres jóvenes pueden practicar yoga. El yoga es bien aburrido y no requiere de condición. Disfrutarás de todos los beneficios del yoga desde los primeros minutos de tu primera clase. Existen un sinfín de mitos que rodean al mundo del yoga. Mitos que pueden hacerlo ver como un ejercicio mágico que te hará superhumanx, y otros que simplemente borrarán todo el interés que puedas tener en tu práctica de yoga.

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Es importante que no creas ninguno de los mitos que giran en torno al yoga, justamente para que no termines desanimándote porque no cumples los requerimientos de los mitos, o porque no logras ver los beneficios que tanto te venden. Simplemente debes de disfrutar de tu propia práctica de yoga, y dejarte llevar por el cómo te sientes antes, durante y después de tus prácticas.