Yoga Tattva Upanishad: Parte 3 de 3
El Yoga Tattva Upanishad (Yoga-tattva-upaniṣad) es uno de los Upanishads menores, y está clasificado como uno de los 20 Yoga Upanishads. En este se habla de una plática entre Brahma y Vishnu, en la que, el Señor del Universo (Vishnu) aborda el yoga-tattva (la verdad del yoga). Habla de la necesidad de practicar yoga para poder alcanzar la liberación (del ciclo de renacimientos) o moksha, menciona las 8 ramas del yoga (las mismas que propone Patañjali), y continúa explicando la práctica de yoga (más enfocada en el Raja Yoga).
A continuación, encontrarás los 142 versos que conforman el Yoga Tattva Upanishad, separados en tres partes. Esta traducción al español del Varaha Upanishad está basada en el la traducción de K. Narayanaswami Aiyar, incluída en Thirty Minor Upanishads (1974) y fue recopilada por oshogulaab.com. Si quieres consultar el texto íntegro, con su versión AITS (Alfabeto internacional de transliteración sánscrita) y en español, puedes descargar el PDF original dando clic aquí.
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1.106 Dentro de doce días, como mínimo, alcanza el estado de samadhi. El sabio refrena la respiración y se convierte en una persona emancipada.
1.107 Samadhi es el estado en que el jivatman (individualidad inferior) y el Paramatman (Mismidad suprema) no tienen diferencia alguna (o tienen la misma condición). Si desea [entonces] abandonar su cuerpo, puede hacerlo.
1.108 Se absorbe en Parabrahman y no requiere de utkranti (salida o ascensión). Pero si no lo desea, y todavía quiere a su cuerpo, vive en todos los mundos.
1.109 y 1.110 A veces se convierte en un deva y vive con honores en el Svarga, o se convierte en hombre o en yaksha a su antojo. También puede tomar la forma de un león, de un tigre, de un elefante o caballo según su voluntad.
1.111 El yogi se convierte en el gran señor y puede vivir todo lo que quiera. Hay diferencias nada más que en el modo de proceder, pero el resultado es el mismo.
1.112, 1.113 y 1.114 Aplicar el talón izquierdo haciendo presión sobre el ano, extender la pierna derecha y sujetarla firmemente con las dos manos, poner la cabeza sobre el pecho e inhalar el aire despacio. Contener el aire todo lo posible y luego eshalarlo lentamente. Despues de practicarlo con el pie izquierdo, practicarlo con el derecho. Poner sobre el muslo el pie que fue estirado previamente. Esto es el Maha-bandha, y hay que practicarlo de los dos lados.
1.115, 1.116 y 1.117 El yogi sentado en Maha-bandha, luego de haber inhalado el aire con la mente concentrada, debe detener el movimiento (interior) del vayu con el mudra de la garganta, y ocupando con velocidad los dos lados (de la garganta). Esto se denomina Maha-vedha, y los siddhas lo practican con frecuencia. Poner la lengua en la cavidad interior de la cabeza (o garganta) y tener los ojos fijos en el entrecejo es lo que se llama khechari mudra.
1.118 Contraer los músculos del cuello y apoyar con voluntad firme la cabeza contra el pecho, es lo que se llama Jalandhara-bandha, que es como un león contra el elefante de la muerte.
1.119 Los yogis llaman Uddiyana-bandha al bandha gracias al que el prana vuela a través del Sushumna.
1.120 Se dice que Yoni-bandha es presionar el talón firmemente contra el ano, contrayendo el ano y haciendo subir el Apana.
1.121 Con el Mula-bandha se unen Prana y Apana, así como nada y bindu, y se obtiene el éxito en el yoga, de ello no cabe duda.
1.122, 1.123 y 1.124 Al practicar de manera invertida (o hacia ambos lados), lo que acaba con todas las enfermedades, se aumenta el fuego gástrico. Por lo tanto, el practicante debe acumular abundante cantidad de provisiones (porque) si ingiere poco alimento el fuego (interior) consumirá su cuerpo en un instante.
125 El primer día debe pararse sobre la cabeza con los pies alzados por breves momentos. Debe aumentar la duración gradualmente, día por día. En tres meses desaparecen así las arrugas y las canas.
1.126 El que practica apenas un yama (veinticuatro minutos) cada día, vence al tiempo. El que practica vajroli se convierte en yogi y en depósito de todos los siddhis.
1.127 y 1.128 Si es posible acaso lograr los yoga-siddhis, sólo él los tiene al alcance de la mano. Conoce el pasado y el futuro y ciertamente se mueve por los aires. El que bebe el néctar de este modo se hace inmortal día a día. Debe practicar vajroli diariamente y entonces se lo denomina amaroli.
1.129 y 1.130 Entonces logra el Raja-yoga y por cierto no se enfrenta a obstáculo alguno. Cuando el yogi culmina su acción gracias al Raja-yoga, obtiene por cierto la discriminación y la indiferencia hacia los objetos. En el camino de la verdad se ve a Vishnu, el gran yogi, el Magno, grande en austeridades, el Purusha excelentísimo, brillante como una lámpara.
1.131, 1.132 y 1.133 Ese seno del que antes uno mamó (en su nacimiento anterior), ahora lo toma (con amor) y recibe placer. Disfruta del mismo órgano genital a través del que nació antes. La que una vez fue su madre, es ahora su esposa y la que ahora es su esposa es (o será) ciertamente su madre. El que ahora es padre, volverá a ser hijo, y el que ahora es hijo volverá a ser padre. Así es como los egos de este mundo van deambulando en la matriz del nacer y el morir, como el balde de una noria, mientras experimenta los mundos.
1.134 y 1.135 Hay tres mundos, tres vedas, tres sandhyas (mañana, mediodía y atardecer), tres svaras (sonidos), tres agnis, tres gunas, y todos ellos están situados en las tres letras (del Om). El que entiende aquello que es indestructible y que es el significado de las tres (o sea del Om), ese es el que tiene enhebrados a todos estos mundos. Esta es la verdad, la condición suprema.
1.136 y 1.137 Como el perfume en la flor, como el ghi en la leche, como el aceite en la semilla de sésamo, y como el oro en el cuarzo, así está situado el loto en el corazón. Su corola está hacia abajo y su tallo hacia arriba. Su bindu está hacia abajo, y manas está situado en su centro.
1.138 Con la letra “A”, el loto se expande; con la letra “U” revienta (o se abre). Con la letra “M” se logra el nada, y el ardha-matra (media letra) es silencio.
1.139 La persona entregada al yoga obtiene la condición suprema que es semejante al puro cristal, no tiene partes y acaba con todos los pecados.
1.140 y 1.141 Como la tortuga mete dentro de sí las patas y la cabeza, de igual modo él inhala el aire y luego lo expulsa por los nueve orificios del cuerpo, y así respira hacia arriba y hacia delante.
1.142 Como una lámpara en una vasija estanca, que arde inmóvil, eso inmóvil que se ve dentro del corazón gracias al proceso del yoga, y que está libre de agitación, luego de haberlo retirado de los nueve orificios, es sólo Atman, según dicen. Así lo afirma el upanishad.
¡Om! Que a los dos nos proteja,
Que a los dos nos nutra
Que podamos trabajar juntos con gran energía,
Que nuestro estudio sea vigoroso y efectivo Que no disputemos (u odiemos a nadie).
¡Om! ¡Paz en mí, paz alrededor mío, paz en las fuerzas que actúan sobre mí!
Así finaliza el Yoga Tattva upanishad, perteneciente al Krishna-Yajur Veda.
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