¿Cómo encontrar el tiempo para meditar?

Más allá de la mente dispersa, uno de los más grandes problemas a los que nos enfrentamos al momento de adentrarnos en el mundo de la meditación es el tiempo. Vivimos un ritmo de vida muy acelerado; desde que suena nuestro despertador y hasta que nos acostamos por la noche nos enfrentamos a un sinfín de actividades que absorben todo nuestro tiempo y nos impiden sentarnos a no hacer nada, a meditar. ¿Cómo encontrar tiempo para meditar con tanta actividad?

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Pero realmente no necesitamos mucho tiempo para meditar. Basta con que te regales unos tres a cinco minutos al día para poder empezar a meditar. Además, aunque estemos cegadxs por el estrés y las miles de actividades del día, solemos tener varios tiempos muertos entre actividad y actividad. Solo es cuestión buscar esos momentos libres y meditar por unos cuantos minutos. No suena tan difícil… ¿o sí?

Hallarse en un estado de ausencia deliberada de pensamiento es tanto concentración como meditación. – B.K.S. Iyengar (El Árbol del Yoga)

Míralo de esta forma, el día tiene 1,440 minutos, 960 si quitamos ocho horas de sueño al día (ojala todxs pudiéramos dormir ocho horas). Si dedicaras 10 minutos de tu día activo a meditar (y creo que 10 minutos es mucho para principiantes) estarías invirtiendo el 1.04% de tu día a la meditación. Realmente estás invirtiendo un porcentaje ínfimo de tu día a la meditación. Toma en cuenta que, ese 1% de inversión podría cambiar por completo el otro 99% de tu día y llevarlo en una dirección más positiva. ¿Te parece una buena inversión?

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¿Cómo es que ese 1% podría mejorar tu día? Sencillo. Simplemente el mantener una práctica de meditación constante te ayudará a liberar el estrés y los sentimientos negativos que se generan en el día a día. También te ayudará a entrenar tu mente para mantenerla bien concentrada y a mejorar tu capacidad de retención de información (la memoria pues). Todo esto combinado te ayudará a tener un mejor desempeño en el 99% restante del día y, por si fuera poco, también te ayudará a descansar como se debe.

La meditación no es algo que se pueda expresar con palabras. Debe ser experimentada directamente en la vida de cada uno. – B.K.S. Iyengar (El Árbol del Yoga)

Como verás, meditar no te quitará mucho tiempo. Es cuestión de buscar esos momentos muertos en nuestro día a día para poder sentarnos a meditar. Podría ser al momento de despertar o antes de dormir, quizá mientras caminas a la parada del camión o al metro, en el tráfico, al bañarte, lavar los platos, antes de comer o justo al terminar tu rutina del gimnasio. Existen un sinfín de técnicas de meditación que pueden acompañarte a entrenar tu mente en casi cualquier situación del día, por lo que encontrar el momento perfecto para meditar puede ser mucho más sencillo de lo que crees.

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Te recomiendo buscar el “por qué” quieres meditar, tu motivación. A raíz de esto, entenderás más a fondo los beneficios que la meditación traerá a tu vida, más allá de entrenar a la mente. Después de eso, puedes buscar esas actividades repetitivas y sencillas (bañarse, lavar trastes, lavarse los dientes, etc.) e incorporar alguna técnica de meditación (yo recomiendo mucho que sea enfocada en la Atención Plena o Mindfulness) a esa actividad. Y, conforme vayas descubriendo los beneficios de la meditación en estos tiempos muertos, irás encontrando otros momentos en los que puedas sentarte a “hacer nada” y a disfrutar el presente… a meditar.