¿Es el yoga malo para el medio ambiente?

Traducción de la nota de Janice Quirt para Yoga International.

Por Janice Quirt

Cada vez más, yoguis y yoguinis se alzan como apasionados defensores de un estilo de vida ecológico. Por ejemplo, he visto estudios y practicantes insistiendo en usar recipientes y botellas de agua reutilizables, evitando e incluso eliminando los plásticos por completo. Pero el plástico no es lo único que socava la sostenibilidad de nuestro sufrido planeta. Definitivamente no soy un santo en lo que respecta al ambientalismo, pero estoy tratando de estar más informada y ser más proactiva y, como resultado, soy más consciente de algunos de los impactos ambientales dañinos de la industria del yoga.

Aquí están mis sugerencias para ecologizar algunos de los peores infractores:

Yoga caliente o Hot Yoga

Lo sentimos, devotxs del hot yoga, pero particularmente en los climas más al norte, a menudo hay un impacto ambiental debido al mayor uso de combustibles fósiles, energía hidroeléctrica o nuclear en los estudios de calefacción. Y además, están todas las duchas adicionales y lavadoras necesarias para lidiar con cuerpos y ropa sudorosos.

Cuando enseñaba y practicaba hot yoga, había días en los que necesitaba cuatro duchas y cuatro cambios de ropa. Entonces, ¿cómo puede el hot yoga volverse más verde? Tal vez los estudios podrían reconsiderar la temperatura óptima para las salas de práctica; podría reducirse por debajo del ideal original. O tal vez los estudios pueden agrupar sus clases calientes en ciertos días para retener el calor en el estudio y que se necesite menos energía para alcanzar la temperatura deseada.

Y, por último, tanto lxs propietarixs de estudios como los yoguis y yoguinis podrían considerar el uso de fuentes renovables para la calefacción y la energía necesaria para hacer funcionar las lavadoras, y usar agua fría y un ciclo de energía eficiente. Por ejemplo, Moksha/Modo Yoga utiliza fuentes de energía renovable siempre que es posible y compra bonos de carbono cuando es inevitable utilizar energía no renovable. También utilizan duchas y grifos de bajo consumo y de bajo consumo, buenos ejemplos de su compromiso general con la vida ecológica.

Viajes de yoga o Retiros

Muchos yoguis y yoguinis adoran asistir a retiros de yoga en hermosos lugares y es posible que tengan que viajar si quieren entrenar con un maestrx específico. Lxs maestrxs de yoga conocidos suelen estar de viaje la mayoría de las veces, ya que dirigen capacitaciones, conferencias de honor y retiros o conferencias de titulares. El problema es que todos esos viajes dejan una importante huella de carbono. Los aviones, trenes y automóviles contribuyen al cambio climático, la contaminación y una variedad de otros males ambientales. Pero los viajes de yoga no terminarán pronto. Entonces, ¿qué debe hacer un yogui de mente verde?

La planificación cuidadosa puede ayudarlo a encontrar un retiro o capacitación que requiera poco viaje o que pueda combinarse con otros viajes (por ejemplo, unas vacaciones, ¡también útiles para el presupuesto!). Y muchxs profesorxs de yoga de renombre ahora ofrecen clases, capacitaciones y conferencias con otros líderes de yoga en línea, lo cual es una opción mucho más respetuosa con el medio ambiente que viajar durante horas.

Cuando se requiera viajar o solo sea parte del atractivo, considera el transporte público y el uso compartido del automóvil cuando sea posible. Lxs organizadorxs de capacitaciones y retiros a menudo alientan y ayudan a facilitar el uso compartido de vehículos y transporte. Quizás puedas viajar en tren en lugar de avión.

Finalmente, podrías considerar comprar bonos de carbono para minimizar el impacto de tu viaje, o trabajar con lxs organizadorxs para contribuir a un fondo de compensación de carbono que sería de particular interés para ellos. Todo ayuda, y cuanto más nos hagamos responsables entre nosotros al hacer nuestra parte, más cambios co-crearemos.

Telas de yoga

Las fibras sintéticas, como las de poliéster, lycra, nylon y spandex, se han encontrado en cantidades alarmantes en los sistemas de agua. Los bichos acuáticos comen estos “microrresiduos” y se transmiten a los humanos a través de nuestro consumo de pescado y mariscos. Las fibras también se eliminan con el agua de la lavadora, por lo que si tiene que usar prendas sintéticas, considere opciones para recolectar las partículas a fin de reducir la cantidad que se libera y se arroja por el desagüe. Los filtros de las lavadoras son probablemente los más efectivos, aunque más caros que las bolsas de malla y otros dispositivos de recolección de partículas. Todavía estamos esperando los datos concretos para conocer la eficacia de algunas de estas soluciones, pero vale la pena probar las menos costosas (por ejemplo, el Cora Ball).

O considera telas naturales como el algodón (orgánico, si es posible), el cáñamo o el lino. Los pantalones de yoga estilo harén 100% algodón son aireados y cómodos (y ciertas variedades también son económicas), pero si los pides en línea, considera de dónde vienen y el espacio que ocupa para llevarlos a la puerta de tu casa.

Y echa un vistazo al bambú: es un recurso sostenible ya que vuelve a crecer muy rápidamente. Sin embargo, los procesos de fabricación de algunxs productorxs de ropa de bambú involucran productos químicos y productos antinaturales, así que haga su debida diligencia. Lyocell y tencel son otros materiales que son prometedores, pero nuevamente, investigue para asegurarse de que los pantalones de yoga que anhela sean realmente amigables con el medio ambiente. Y nuevamente, siempre que sea posible, compre a un productor local para evitar el impacto de carbono del envío al extranjero, o considere pedidos al por mayor o grupales para aprovechar al máximo el impacto de su envío.

Materialismo del yoga

El yoga ciertamente no es inmune a las tendencias. En una conferencia de yoga reciente a la que asistí, estaba charlando con un amigo en las afueras del mercado. Mientras luchábamos por escucharnos sobre el estruendo, ella comentó: “Esa es una multitud bastante intensa en el stand de Spiritual Gangster”. Eso era cierto. Hordas de yoguis y yoguinis se aferraban frenéticamente a camisetas y otras prendas con eslóganes.

Una mirada a Instagram, y no se puede negar que la mercancía de yoga genera mucho dinero, y que se puede ganar mucho dinero con los estilos que están de moda (ya sea durante una semana o una temporada, antes de que se conviertan en noticias viejas). Ese enfoque desechable no es bueno para nuestras billeteras ni para el medio ambiente. Claro, es natural querer tener un equipo de yoga actualizado, pero el alto costo de deshacerse rápidamente de las tendencias de ayer debe considerarse seriamente por el bien de nuestro planeta. ¿Podemos completar nuestro guardarropa con algunas piezas sólidas, funcionales y duraderas y permitir que los artículos de moda se conviertan en la excepción y no en la regla? ¿Podemos dar elogios por la compasión y la inteligencia, y no por lo bien que se ve la ropa de alguien?

Como yoguis, si podemos encontrar satisfacción desde adentro, en lugar de un perchero con ropa de última moda, seguramente beneficiará nuestra paz interior. Pero también beneficiará al medio ambiente, gracias a menos desperdicio, menos carbono del envío y menos frenesí general.

Comida y bebidas

Ese increíble bar de jugos en el estudio de yoga hace batidos saludables y deliciosos… pero ¿cuántos clientes traen vasos reutilizables? He visto más vasos de plástico y vasos de café de un solo uso en la basura de los estudios de yoga de los que me gustaría reconocer. Sé que ya hay muchas cosas que debes recordar para llevar a la práctica (y a veces es un milagro cuando logras aparecer con tu tapete). Pero llevar un recipiente de bebida reutilizable, incluso un tarro para bebidas, junto con un recipiente de vidrio para cualquier alimento que desee comprar después de una gran clase es fácil una vez que se convierte en un hábito.

Tapete, ropa de yoga, recipiente(s) reusable(s)—verifica, verifica, verifica. De esa manera, tu reabastecimiento saludable después del yoga puede ser bueno para tu cuerpo y el planeta. También puede incluir su propia servilleta de tela para que no necesite las de papel. Y trae su propia pajilla reutilizable, o pídale al estudio/barra de jugos que le proporcionen pajillas reutilizables o de papel en lugar de las de plástico. Los estudios pueden incluso comprar agua en botellas de vidrio y animar a los yoguis y yoguinis a reutilizarlas o suministrar tarros para jugos o agua. Hay una variedad de formas de evitar un contenedor de basura de estudio que se parece al que está detrás de un restaurante de comida rápida.

Hablamos mucho en yoga sobre la compasión y la intención. Dirijamos ese enfoque al medio ambiente, asegurándonos de que nuestra práctica y nuestros hábitos de yoga sean ligeros en la tierra.

Nota: Esta nota está basada en la que se publicó Janice Quirt en Yoga International y fue traducida para que el público hispanohablante pueda conocerla. Puedes consultar la nota completa en idioma original (inglés) en https://yogainternational.com/article/view/is-yoga-bad-for-the-environment/