Bikram Yoga (parte 2): El Origen y la Industria del Bikram Yoga…

Durante varios años, el Bikram Yoga fue uno de los estilos de yoga más populares entre las personas del mundo fitness. Y es que, según su creador, este estilo de yoga, practicado en un salón a 40° grados, te permitirá avanzar rápidamente en tu práctica, al mismo tiempo que te generará fuerza, flexibilidad y te ayudará a perder mucho peso. Más allá de las clases y sus beneficios (y peligros), el Bikram Yoga se convirtió en una engañosa industria multimillonaria. ¿Cómo es que surgió y se popularizó la marca Bikram? Continúa leyendo y acompáñanos a conocer su origen.

Bikram Yoga:

Debido a la extensión que tendrá este post, lo dividimos en tres partes, mismas que puedes consultar a continuación:

• Parte 1: ¿Qué es Bikram Yoga?
• Parte 2: El Origen y la Industria del Bikram Yoga…
• Parte 3: Bikram Choudhury, el gurú de la depredación sexual…

La vida de Bikram Choudhury

Bikram Choudhury nació en 1944 en Calcuta, India. Al cumplir 25 años, en 1969, inició su práctica de Yoga, aunque después él aseguraría que inició su práctica desde niño y que ganó tres años consecutivos el Campeonato Nacional de Yoga de India; sin embargo, no existe ningún registro de esta afirmación, y la primera competición tuvo lugar en 1974. De hecho, en el libro libro “Yoga de Calcuta” de Jerome Amstromg, el autor demuestra que la afirmación de Bikram es mentira.

En 1971, Bikram llegó a Los Ángeles, Estados Unidos, donde comenzó a dar clases de yoga. En ese tiempo desarrolló la serie de 26 posturas de Bikram Yoga y abrió su primer Centro de Yoga, llamado Bikram Yoga, en él que ofrecía clases en un cuarto a 40° grados, simulando el clima y humedad de la India. Y, al ser un estilo único e innovador, captó la atención de varias celebridades, popularizando su Bikram Yoga rápidamente.

Para los años 90, Choudhury ya contaba con varios centros de Bikram a lo largo y ancho de Estados Unidos, generando una pequeña fortuna; por lo mismo, en esa época decidió a ofrecer cursos de Certificación en su estilo de yoga. Las certificaciones eran multitudinarias y se realizaban en diferentes hoteles de todo el mundo, permitiendo que cualquier persona pudiera aprender del, autodenominado, gurú. Y, cada estudiante debía de volver a tomar la certificación cada tres años, para mantenerse actualizado (aunque fuera la misma serie siempre).

Bikram Choudhury se había convertido en una de las figuras más reconocidas en el mundo del yoga, a nivel internacional; lo que lo inspiró a fundar, junto a su esposa Rajashree Choudhury, (quien sí ganó el primer Campeonato Nacional de Yoga organizado por la Federación de Yoga de India en 1979) la Federación de Yoga de Estados Unidos y, pocos años después, la Federación de Deportes Internacional de Yoga (IYSF, por su sigla en inglés).

La industria del Bikram Yoga

Más allá de un estilo de yoga, Bikram es una marca. Una marca cuyo modelo de negocio fue realmente prolífico, llevando al señor Choudhury a convertirse en multimillonario; un hombre al que le gustaba presumir sus riquezas materiales y su poder político, a través de las celebridades que se habían vuelto sus “amigxs”. Nada más alejado del principio yogui del desapego. Pero… ¿Cómo es que se formó este imperio?

La respuesta es muy sencilla. Y es que, aprovechando el auge que tenía el señor Choudhury y su estilo de yoga, entre las celebridades, tuvo la idea de crear un modelo de franquicias enfocado en centros de yoga…

En vista de que, según el (disque) gurú, todas las posturas y la serie del Bikram Yoga, estaban registrados, vendía franquicias para que cualquier persona pudiera poner su centro de Bikram Yoga en cualquier ciudad, por un costo.

Pero no bastaba con pagar la franquicia para poder poner tu propio estudio de yoga caliente; de hecho, cada centro debía contar con maestras y maestros especializados en este estilo. Para eso debían de acudir una vez cada tres años a los cursos de certificación impartidos por el mismísimo Bikram. Y los cursos no eran nada baratos. Al final, era un negocio redondo que generaba millones de dólares.

Por todo esto, en el 2012, Bikram trató de demandar al estudio Yoga The People, fundado por un exestudiante del mismo Choudhury, en Nueva York. Sin embargo, la Oficina de Derechos de Autor de Estados Unidos resolvió que las posturas, o asanas, de yoga no podían ser inscritas por derechos de autor, al igual que las series, por lo que cualquier persona o estudio podría seguir ofreciendo esta serie. Eso sí, no podrían usar la marca Bikram al hacerlo. Y, a raíz de esto, el Gobierno de la India inició la documentación de yoga asana, o posturas, creando una base de datos, con más de 30 millones de páginas, para que sea consultada por las oficinas de patentes en todo el mundo.

Hoy en día, muchxs de lxs franquiciatarixs de Bikram han decidido dejar de pagar los derechos de la marca Bikram, ofreciendo clases de Hot Yoga, mismas que son más libres, y pueden o no, usar la serie de los 26 asanas del estilo original. Pero, más allá del dinero, estos estudios han decidido alejarse del nombre y la marca de Bikram Yoga para no ser asociado con su creador, el señor Bikram Choudhury. ¿Por qué? Acompáñanos a conocer el escándalo de Bikram y por qué es buscado por la ley en varios países.