Qué es el linaje del yoga y por qué debemos cuestionarlo…

La Real Academia Española (RAE) otorga dos definiciones de la palabra linaje; por un lado, dice que se refiere a la ascendencia o descendencia de una familia, especialmente noble, y por el otro, se refiere a una clase o condición de una cosa (ej. vende mercancías de todo linaje). Sin embargo, en el mundo del yoga, el linaje se refiere a una línea ininterrumpida de maestrxs y discípulxs que se dedican a transmitir el conocimiento de la manera más íntegra posible. De esta forma, el/la discípulx se convierte en maestrx de nuevas generaciones, mismas que continuarán con el ciclo de enseñanza.

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En el mundo del yoga se dice que, este linaje permite y asegura que el conocimiento se transmita de manera correcta de generación en generación, permitiendo que el conocimiento y disciplina del yoga continúe vive a lo largo de los siglos. Si no… ¿De qué otra forma pudo sobrevivir el yoga desde el milenio III a.C.? Y es que, el yoga no se puede aprender a través de los libros, pues es una disciplina que se tiene que vivir para entenderla; no, el yoga se aprende a través de la Gurukula.

En la mitología india, Krsna representa al arquetipo del gurú y es considerado maestreo de los maestros, el ser más enaltecido que reside en el corazón de todos. – Richard Freeman (El Espeño del Yoga)

¿Guru-khé? La palabra Gurukula o Gurukulam[1] (गुरुकुल) viene del sánscrito y es la conjunción de los términos Gurú, que se traduce como maestro, y Kula, que se puede traducir como familia o casa; de esta forma, el Gurukula se podría traducir como la familia o casa del gurú. Ahora, debes saber que, la Gurukula fue el sistema de educación tradicional de la India, previo a la llegada de lxs ingleses; aunque deriva de la tradición hinduista, también es muy común en otras religiones orientales como el Jainismo, Budismo y Sijismo.

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¿Cómo funcionan o funcionaban los Gurukulam? Es muy sencillo, en este sistema de educación espiritual las y los shishya (estudiantes o discípulxs) viven con el gurú (o muy cerca) en la misma casa, o cueva[2]. En los Gurukulam las y los discípulos se sientan alrededor del (la) gurú para aprender de él (ella) y se dedican a la práctica espiritual y son corregidxs por su maestrx. Además, se dedican a ayudar a su gurú con las mundanas labores domésticas y en otros aspectos de su vida, para permitirle concentrarse en la enseñanza y la búsqueda de la iluminación.

Sólo cuando haya dolor verás la luz. El dolor es tu guru. Igual que experimentamos felizmente los placeres, también debemos aprender a no perder nuestra felicidad cuando llega el dolor. De igual manera que vemos el bien en el placer, debemos aprender a ver el bien en el dolor; aprender a estar cómodos incluso en la incomodidad. – BKS Iyengar (Luz sobre la Vida)

Según cuenta la (nueva) tradición del yoga, fue a través de los gurukulam, de la enseñanza directa de gurú a discípulxs, que los yogas[3] lograron sobrevivir al paso de la historia. Pero, por la manera en la que se enseñaba el yoga (por el ascetismo de quienes lo practicaban) y por la llegada de los comerciantes ingleses a la India, el Yoga (o los Yogas) quedó prácticamente en el olvido. No fue sino hasta finales del siglo XIX, que el yoga renació entre sus cenizas. Es así, que el yoga contemporáneo proviene de unos cuantos[4] maestros de yoga, entre los que se encuentran:

• Tirumalai Krishnamacharya (1888-1989)
• Swami Sivananda Saraswati (1887-1963)
• Swami Kripalvanandji (1913-1981)
• Yogi Bhajan (n. en 1929)
• Paramahansa Yogananda (1893-1952)
• Swami Muktananda (1908-1982)
• Swami Vivekananda (1863-1902)[5]

Podríamos decir que, estos maestros son los bisabuelos de todos los estilos de yoga que practicamos actualmente en Occidente (e incluso en la India). Estos maestros tuvieron varios discípulos, muchos de ellos crearon sus escuelas, mismas que buscaban continuar con el linaje (en este caso enseñanzas) de su gurú. Estos discípulos se convirtieron en maestros y también tuvieron a sus discípulos (que también se convirtieron en maestros), y así se creó la idea del linaje en el mundo del yoga.

Es buen sabido que la obra de dos gurus radicados en Bombay, Sri Yogendra (1897-1989) y Swami Kuvalayananda (1883-1966), junto con las enseñanzas de T. Krishnamacharya (1888-1989) y sus discípulos de Mysore, famosos hoy en día, contribuyeron sustancialmente a despertar el interés del público por las asanas hatha yóguicas. – Mark Singleton (El Cuerpo del Yoga)

El linaje de enseñanza es muy importante para muchas y muchos practicantes de yoga (especialmente en el mundo del Ashtanga Vinyasa Yoga). Un gran número de escuelas/estudios de yoga suelen anunciar su linaje para legitimar el conocimiento de quienes imparten su clase y asegurar que, quienes practiquen con ellxs tendrán el mejor acercamiento posible al yoga, siguiendo una auténtica tradición milenaria.

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Pero… ¿Qué tan real es esta transmisión de conocimiento? ¿El linaje realmente habla de una tradición milenaria? Si el Yoga Postural Contemporáneo, que practicamos hoy en día, realmente fuera una sucesión directa del conocimiento del Yoga Clásico, sí podríamos hablar de un linaje milenario. Sin embargo, debemos entender que, ninguno de los maestros de Yoga Contemporáneo (refiriéndome a los de la lista que incluí hace unos párrafos) realizó una transmisión íntegra del Yoga Clásico. De hecho, todos ellos crearon una nueva escuela de Yoga, basándose en las enseñanzas de sus maestros[6] y de (una mezcla de) los textos ancestrales. Esto cortaría el verdadero linaje del yoga.

Saber posturas y otras técnicas no lo convierten a uno en yogui desde el punto de vista del ámbito tradicional indio; es menester haber recibido una iniciación formal a manos de un gurú calificado. – Adrián Muñoz (Radiografía del hathayoga)

Bueno, podríamos hablar de un linaje directo desde estos maestros contemporáneos. Sí, sí podríamos hablar de un linaje que inicia con los maestros de principios del siglo XX. Pero… tomemos el ejemplo de los (y la) discípulos de Tirumalai Krishnamacharya. Krishnamacharya tuvo un sinfín de practicantes y discípulos, entre los que destacan:

• K. Patabhi Jois, (n. en 1915)
• T.K.V. Desikachar, (hijo de T. Krishnamacharya, n. en 1938)
• B.K.S. Iyengar, (cuñado de T. Krishnamacharya, n. en 1918)
• Srivatsa Ramaswami (n. en 1939)
• Mataji Indra Devi (n. en 1899)

Bajo el entendido del linaje del yoga, los cuatro grandes discípulos (y la discípula) de Krishnamacharya debieron continuar con la enseñanza y el estilo de su maestro, conocido como el bisabuelo del yoga. Sin embargo, cada uno de ellos crearon estilos (o escuelas) radicalmente diferentes de yoga. Jois fundó el Ashtanga Vinyasa Yoga, Iyengar el Iyengar Yoga y Desikachar el Viniyoga[7]. Entonces, si es un linaje directo… ¿Por qué son estilos y enseñanzas tan diferentes?

Las conductas que aseguran el éxito son más o menos de esperar: la determinación, la dedicación fervorosa, la valentía o el coraje, el conocimiento, la fe en las instrucciones del guru y la evasión de malas compañías. – Adrián Muñoz (Radiografía del hathayoga)

Hay quienes aseguran que, los cuatro discípulos estudiaron en diferentes momentos de la vida de Krishnamacharya, por lo que aprendieron diferentes estilos de yoga del bisabuelo del yoga. Sin embargo, el estilo de yoga de Krishnamacharya (como lo describe en sus libros) era muy diferente al enseñado por sus discípulos. De hecho, el Krama Yoga de Srivatsa Ramaswami (el discípulo menos famoso) es el que más se parece al que describe su gurú en Yoga Makaranda (El Néctar del Yoga). A su vez, las y los discípulos de Iyengas, Jois y Desikachar han creado sus propias escuelas/estilos de yoga, como es el caso de Larry Schultz que fundó el Rocket Yoga; por lo que, también se rompe el linaje como tal.

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Aún así, existen muchos estudios de yoga, especialmente los enfocados en Ashtanga y Krama, que aseguran mantener intacto el linaje de sus maestros, asegurando que el conocimiento y técnicas de sus maestros será transmitido transmitido de manera íntegra. Sin embargo, a fin de cuentas, las escuelas que ofrecen un linaje específico están usando una eficiente estrategia de venta. No digo que no sea una estrategia válida, ni que el linaje no sea algo 100% real, sino que debe ser cuestionado para evitar caer en el romanticismo del yoga.

¿Romanticismo del yoga? Con esto me refiero a la creación de una historia y filosofía simplificada, que se basa en una interpretación básica de los libros antiguos y que mezcla las diferentes escuelas clásicas del yoga sin un verdadero análisis de las mismas. Y, es que, al caer en este romanticismo del yoga, terminamos realizando una práctica basada en la ignorancia y la credulidad, llevándonos a la apropiación cultural del yoga.

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[1] Es la forma correcta (sánscrita) del plural de Gurukula; aunque en occidente solemos usar los términos gurukulas o gurukuls como plural.

[2] Tomando en cuenta que, muchos ascetas solían vivir en cuevas, chozas y otros rincones

[3] Uso el término Yogas (en plural) porque se desarrollaron diferentes escuelas y técnicas a lo largo y ancho de la India (y la historia), dando lugar al Raja Yoga, Hatha Yoga, Jnana Yoga, Bhakti Yoga, Karma Yoga, Mantra Yoga y Tantra Yoga, entre otros.

[4] Por lo menos son unos cuantos los que lograron trascender en la historia; probablemente hubo otros maestros que no lograron ganar la fama de los que aquí se presentan.

[5] Cabe mencionar que, estos no son los únicos linajes que existen en el mundo del yoga contemporáneo; hay muchos otros maestros que iniciaron con sus propios linajes de enseñanza.

[6] Mismos que pudieron no existir como tal.

[7] En el caso de Indra Devi, ella no creó un estilo como tal, sino que creó la Fundación Indra Devi.